01 agosto 2007

El Trompas y la poesía que ya no serán más.

Hace mas o menos dos años, falleció un gran amigo mío, ¿su nombre? no tendría empacho en escribirlo aquí, y donde que yo fui de los pocos de sus cuates del centro del D.F. que lo sabía, y completito, pero creo que el apodo, como todos lo conocían, era mas agradable para él, incluso cuando se presentaba ante alguien, él mismo decía: “El Trompas, para servirle”, así es que quedará su presencia catalogada –de buena forma- como El Trompas, sin mas ni mas.

El Trompas, era un individuo singular en su trato para con los demás, de muy buenos sentimientos, con un aparente pequeño problema, (posteriormente, nos dimos cuenta que mas bien era un gran problema), tal que, finalmente lo llevó a la muerte, pero bueno, problema, enfermedad o lo que haya sido, no desmerita lo calidad como ser humano que era.

Otro amigo, de nombre Jesús, un día me pidió que le hiciera una poesía...
-”pinche Canito, hazme una poesía para tener con qué llorar...ya he llorado con todas las de José Alfredo, las que cantan Javier y Chente, pero quiero algo para mi, quiero que cuando estemos con los cuates me la recites, así, a tu estilo, mientras que yo, quiero llorar mucho”-
Me contó lo que le había sucedido... parece casi obvio que se tratara de problemas de pareja, en éste caso había habido un rompimiento y el tipo estaba destrozado, cuando menos así lo decía, aunque no se le notaba demasiado, o bueno, se le notaba solo cuando se ponía pedo.

La escribí, pero por cuestiones del destino no pude presentársela nunca, Jesús se fue quien sabe para donde, y no lo volví a ver... nunca conoció la poesía que me caía gorda, la poesía que no me gustó hacer... por el simple hecho de ser por encargo.

Estando un día en una bohemia en el Bar Isabel, con mi cuate guitarrista Pedro de la Barca, un cabrón grandote, barítono, que toca magistralmente su madera, me llegó la inspiración de decir poesía, generalmente no me gusta decir poesía cuando alguien me lo pide, si no cuando se me hinchan, pero ese día fue uno de esos, le grité a Pedro: “música para poesía!!”, recibí los primeros acordes llenos de tristeza, Pedro me conoce y sabe que cuando digo poesía... la cosa no viene nada bien, es para ponerse tristes... todos... a güevo...
...Y comencé a recitar, bueno recitar es mucho decir, mas bien le queda la etiqueta de “decir con sentimiento” la poesía aquella que le había armado a Chucho (Jesús), obviamente nadie la conocía, pero todos ahí notaron que estaba manufacturada con palabras llenas de profundo sentimiento... el Trompas se encontraba en el lugar, y cuando percibió las primeras palabras, se acercó, casi inmediatamente comenzó a llorar como si fuera una llave de agua abierta... CONTINUARÁ.

5 comentarios:

Concharrita dijo...

Monero..veo que eres todo un estuche de monerías, hay algo que no hagas con tanta gracia y elocuencia??

Yo ya me quedé picada con la historia y espero pronto conocer la poesía, que digo conocerla, escucharla de tu propia voz y en la misma cantina donde el Trompas lloró...

Felicitaciones por todas tus caricaturas...están de no ma... pero la de Cuauhtémoc y su cuello no tuvo mauser...jajajajajajjaja..me reí como media hora....

mONERO jOSEjUAN dijo...

Concharra!!

Deja tomar tantito aire para continuar con el chollo (choro/rollo) éste... ya conocerás el final... y el Bar Isabel (Isabel la Católica & El Salvador).

Gracias por los comments!!
tu cuate:
jOSÉJUAN

Kathya dijo...

GRACIAS!!!!!!! la parte q no entendia era la d donde sacar la foto, jaja

lo intentare... grax :)

Chilangelina dijo...

Y luego????

Ash, como telenovela brasileña, en lo mero bueno le cortas...
Monero, queremos el final de la historia, conocer la poesia y saber si Jesus la oyo alguna vez...

mONERO jOSEjUAN dijo...

No os desesperéis... mas pronto que rápido, conocerán todas esas interrogantes que no las dejan dormir...

Cheers!!
j.j.

HASTA LA VISTA BABYS...!!

HASTA LA VISTA BABYS...!!